Por Myriam F. Torres
El Barcelona venció con un contundente 4 a 0 ante el Almería, dirigido por el ex jugador azulgrana Sergi Barjuán, que debutaba en el banquillo andaluz y que hizo un partido bastante correcto, sobretodo en la primera parte, donde defensivamente fue un fortín solo derruido una vez por Messi.
Luis Enrique revolucionaba el once inicial, por una parte obligado por las sanciones y lesiones y, por otra, por sus famosas rotaciones, así pues en el once inicial destacaba la presencia de Bartra, Sergi Roberto y Pedro. El Barcelona dominó el partido, aunque no fue ni mucho menos su mejor versión, y el Almería defendió muy bien su portería con las líneas muy juntas, lo que dificultaba las acciones ofensivas del equipo local, provocando que Bravo tuviese un partido bastante cómodo, ya que el conjunto visitante solamente tuvo una ocasión clara. No fue hasta pasada la media hora de juego cuando Messi, en una jugada marca de la casa, desbordando hacia el interior y colocando una magnífica rosca ante la que nada puede hacer Julián, subió el primer gol al marcador, resultado con el que se llegaría al final de los primeros cuarenta y cinco minutos.
La segunda parte iba a deparar un Barcelona más efectivo y prueba de ello fue que a los diez minutos de comenzar, Luis Suárez se puso el disfraz de Messi y calcó prácticamente la jugada del primer gol del argentino, aunque esta vez Julian llegó a tocar el balón pero, como pasó en la primer parte, tampoco pudo detener el gran lanzamiento. Las esperanzas del Almería de puntuar en el Camp Nou se desvanecieron por completo, aunque tuvieron que pasar otros veinte minutos desde el gol de Suárez para que, en una jugada a balón parado y como en partidos anteriores, un defensa blaugrana (Bartra), tras un gran cabezazo, colocara el tercero en el marcador. Desde ese momento hasta el final, las ocasiones culés se sucedían con Pedro, Suárez y Messi, a este incluso le anularon un gol por un dudoso fuera de juego. El cuarto gol se acercaba aunque antes de eso una espectacular chilena de Zongo, que si no llega a ser anulada por el árbitro, se podía haber convertido en uno de los mejores goles de esta Liga pero, ya en el tiempo de descuento y tras una gran jugada de Pedro que asistió a Luis Suárez, se colocó el definitivo 4-0 en el marcador y segundo tanto charrúa de la noche.
Un partido trabado que sigue dejando al Almería inmerso en puestos de descenso y que el Barça resolvió de manera efectiva. A falta de ocho jornadas para acabar el campeonato, sigue manteniendo la diferencia de cuatro puntos respecto al segundo clasificado y ya con las vistas puestas a sus próximos enfrentamientos con el Sevilla y el PSG.
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